martes, 15 de junio de 2010

DESDE LA SECRETARIA DE AMBIENTE DE CORDOBA

LA RECUPERACIÓN DE LOS AMBIENTES NATURALES ES NUESTRA PRIORIDAD


Por Raúl Costa
Secretario de Ambiente
Gobierno de la Pcia. de Córdoba


En el ejercicio permanente por promover la conservación y protección del ambiente para evitar la pérdida de grandes masas de bosques nativos, resulta primordial llevar a cabo programas de preservación y recuperación de los recursos naturales de nuestra provincia.
Por ello, y continuando con la política que hemos venido implementando, permanece activo el Programa de Restauración Ambiental de Áreas Incendiadas orientado a remediar el daño provocado por el fuego en los ambientes serranos.
La prioridad es aunar los esfuerzos de toda la comunidad para potenciar la acción del Estado y lograr la recuperación de nuestro patrimonio natural.
Para alcanzar una intervención eficaz, nuestras acciones están orientadas, en primera instancia, a evitar que los incendios rurales se produzcan. Para esto, cobra un papel fundamental en nuestra actividad la educación y concientización a través de canales formales y no formales dirigidos a sectores específicos de la ciudadanía considerados como posibles generadores de incendios.
Hoy se torna imprescindible incorporar programas de restauración ambiental, proyectos educativos y de prevención, ya que la mayoría de los incendios se inician intencionalmente o por descuido del hombre. Por incidencia de diferentes factores, en especial los climáticos, estos producen pérdidas de biodiversidad, de paisaje, de producciones agropecuarias, de inversiones relacionadas con el turismo, de viviendas y en algunos casos de vidas humanas.
De la biomasa vegetal, se pierde fauna asociada, se degradan y se pierden suelos, se contaminan aguas superficiales, se inician o profundizan procesos de erosión y muchas veces el impacto es tan severo que se hace inevitable la desertificación del territorio.
La biodiversidad de la zona incendiada experimenta cambios en su estructura; además de perder parte de su hábitat, los bosques que sobreviven quedan como parches aislados, fragmentados por los incendios lo que genera problemas de conectividad ambiental. Por lo tanto, las especies animales ven peligrar su reserva genética viable y su supervivencia a largo plazo.
El fuego provoca también cambios en los sistemas hidrológicos, ya que aumenta la repelencia del suelo al agua, y disminuye su conductividad hídrica, infiltrando los suelos incendiados menos agua de lo normal. Con las partículas de suelo se pierden también numerosas semillas y esporas de plantas, y con ellas un reservorio de biodiversidad. En tanto, la vegetación, como ya sabemos, produce el oxígeno que respiramos y su quema elimina temporalmente ese material fotosintetizador y oxigenador que todos los seres vivos necesitamos y además, contamina el ambiente con la liberación de CO2.
Aunque existe la posibilidad de regeneración natural de la vegetación quemada, la que surge es más pobre en diversidad y ya no es igual a la que ardió.
Todo el ecosistema rural recibe un fuerte impacto. La compleja trama de relaciones que une la vida de animales, plantas y microorganismos se derrumba. Así los ciclos de la materia y de la energía que trascurren fuertemente controlados por los organismos vivos en un bosque, pierden toda forma de control y tardaran muchos años en volver a un equilibrio aceptable.
Con todo esto, se pueden deteriorar gravemente las tres funciones básicas de los ecosistemas forestales: la función productora, la función conservadora y la función social, educativa y cultural-afectiva. Estas funciones se consideran servicios ambientales imprescindibles para mantener la calidad de vida de los seres humanos.
Asesorar a los municipios y comunas que aún no depositan sus residuos en vertederos controlados, también es una estrategia que se está lanzando para minimizar el riesgo de incendios que se originan en basurales a cielo abierto a causa de descuidos humanos. Esta iniciativa se desarrolla de manera conjunta al Plan Provincial de Manejo del Fuego en el seno de las comunidades regionales, escuelas y municipios.
Estamos trabajando para revalorizar nuestros bosques forjando en la sociedad conciencias cada vez más comprometidas con el medio ambiente para que todos disfrutemos de nuestros recursos naturales de manera responsable y participemos activamente en su cuidado y recuperación.

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