Los más pininos del gimnasio, Rodrigo y Jhonatan no faltan a las prácticas y disfrutan con entusiasmo los entrenamientos.En una de las salas de la ex estación del F.F.C.C., donde funciona la Casa de la Cultura, al atardecer de cada día lo que antiguamente era el sector de boleterías de la estación, de un momento a otro se transforma en Gimnasio para practicar Boxeo y distintas variantes de las Artes Marciales.
La parte de Box está a cargo del ex pugilista Carlos «Metralleta» Quiñones, quien se considera un apasionado del deporte de los puños y, a pesar de no contar con el apoyo que debería tener, continúa con sus ganas de formar nuevos pugilistas. Pero más allá de eso, Carlos trata de acompañar con su sabiduría y experiencia a los chicos y jóvenes que tienen ganas de practicar este deporte.
La figura del lugar es Dario «El Verdugo» Balmaceda, pugilista profesional, ubicado en el séptimo lugar de la Categoría Super Mediano.
Carlos «Metralleta» Quiñones comparte el Gimnasio con el Profesor de Artes Marciales Luis «Rompe Huesos» Britos. La imagen los muestra junto a Mereko «Cuidador de 7 llaves», quien controla el lugar para que no ocurra nada raro.A medida que van llegando los futuros boxeadores -niños y jóvenes de distintas edades- Carlos dialoga con el cronista de Emisario mientras acomoda el gimnasio que está bajo la «custodia» de Mereko, conocido personaje local que observa los entrenamientos y cuando puede también le pega a la bolsa.
‘‘Ahora tenemos alrededor de diez chicos de distintas edades, lo que pasa que con el frío muchos no vienen, pero ahora que arranca la temporada buena se van a sumar más’’, comienza diciendo «Metralleta», a la vez que saluda a sus pupilos que van llegando y agrega ‘‘Están aprendiendo lo que es el tema del boxeo, les estamos enseñando de a poco, no hay apuro, pero con las ganas que entrenan -inclusive los más chiquitos- te dan ganas de seguir peleándola, a pesar que nos cuesta mucho porque esto tiene su costo.
Jhonatan Castellano viene de familia de boxeadores... Tiene alma de campeón y le pega duro a la bolsa... Entre los jóvenes ya tengo un pibe listo para debutar (Silvio Orozco), estoy esperándolo para fogearlo’’, comenta mientras le venda las manos a unos de los más pequeños, «Pitufito» Castellano, quien viene con sangre de noqueador en sus venas.
Más adelante Quiñones, al referirse a las necesidades del gimnasio, indicó: ‘‘Acá siempre se rompe algo y siempre faltan cosas, guantes, cabezales, pero todo lo bancamos nosotros, no nos queda otra, porque no tenemos ningún tipo de apoyo a pesar que con nosotros está Dario Balmaceda, un boxeador profesional que nos está haciendo quedar muy bien cuando pelea en grandes festivales del país, pero ¿ayuda?... nada. Hemos hablado con Carena (Director de Deportes Municipal), pero hasta ahora no nos ayudó con nada, dice que no tienen plata’’
Sobre el final de la entrevista el clima de gimnasio de box se torna entretenido, de a poco va tomando color y se siente el aroma de ring, los más chiquitos -Rodrigo Sosa- y Jhonatan Castellano comienzan a calentar el físico. Los más grandes le dan a la bolsa, otros con la soga, y Carlos «Metralleta» Quiñones cambia su estado de animo, es un apasionado por el box y su experiencia de años dentro del pugilismo la contagia con la mejor onda a los futuros boxeadores que puede tener nuestra ciudad.
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